Champions I

Primera Faraón Cup que ganaron los tebanos. Anverso y reverso

Harto estaba el faraón Nomekiteslaphelota XXVII de asistir a partidos de la liga Egipcia. Desde hacia años tenia en mente montar una copa internacional, la Pirámides Cup, pero como sus guerreros arrasaban con todos los alrededores no encontraba países contra los que competir. Pensó en los hebreos, que al fin y al cabo los tenía de esclavos en su propio país. Así que les ordeno montar dieciocho o veinte equipos (los historiadores no se ponen de acuerdo) y les organizo una liga. Los ocho mejores de cada liga jugaban unas eliminatorias, luego semifinales y la final.

Durante varias dinastías, concretamente de la III a la V (2800-2323 a.C) la final la jugaron siempre Karnac contra Luxor, con alguna participación de Tebas. Este ultimo gracias a que ficho a Rahotep que durante unos años fue el Khamerernebty (máximo goleador, Pichichi) de la liga, lo que le permitió acceder a un par de finales de la mal llamada Pirámides Cup.

Muchos siglos los hebreos sufrieron en silencio los arbitrajes caseros cuando jugaban las eliminatorias contra los equipos egipcios. Nunca pasaron de la liguilla clasificatoria, excepto en la de la temporada 2623/2622, bajo el reinado del faraón Shehetepibre XIV, que el arbitro Meresankh III dio por valido un gol en claro fuera de juego. En esa época el fuera de juego no solo no lo entendían las mujeres, si no que entre los hombres había discrepancias en su aplicación, con lo que se decidía la sanción a criterio de los jueces, que tampoco lo tenían claro. La interpretación de esa jugada fue el final de Meresankh III y de una larga dinastía de monjes-arbitros, tras el partido fue encerrado en una mastaba. Lo encontraron momificado muchos siglos después todavía con el silbato en la boca.

Los hebreos pasaron a las semifinales, pero les pusieren el partido el mismo día de la fiesta del cordero con lo que ante la imposibilidad de asistir al encuentro por ser la fiesta nacional, Moisés, el seleccionador hebreo harto de tanta descriminación, reunió a todos los equipos de la liga hebra, a la afición y tras una patriótica arenga dejo plantados a los egipcios y se fueron andando por el desierto en busca de una liga en igualdad de condiciones.

Cuando Shehetepibre XIV se entero mando sus huestes a perseguir a los desalmados traidores. Los encontró a orillas del Mar Rojo. Moisés estaba platicando con el fenicio Villar, un prócer del futbol de la época, que llevaba 63 años dirigiendo la F.F.F (Federación Fenicia de Futbol) sobre la incorporación de los equipos hebreos en la Liga Fenicia ya que la ligas de los Griegos, Romanos, Galos, Hispanos, Británicos y la de los bárbaros del norte (mas tarde llamados Germanos) que aunque eran países que todavía no existían como tal se los había inventado y los dirigía organizándoles campeonatos locales y dirigiendo a los árbitros a través de su hombre de paja Petronio. Vamos, que el Villar de marras era un mago. Moises se acojono, las cosas como son, al ver tanto egipcio a la carrera con armas de destrucción masiva. Pidío ayuda a Villar y este apiadándose de él le ayudo…..

Continuara... o no.